El Cannabidiol más conocido como CBD es uno de los principales componentes de la planta del cannabis.
En la actualidad, los científicos y médicos de todo el mundo están probando y confirmando sus propiedades terapéuticas. Una sustancia segura y no adictiva, es uno de los más de cien fitocannabinoides, con más aplicaciones médicas hasta ahora y le confieren a la planta un amplio perfil medicinal y terapéutico.
Está estrechamente relacionado con otro fitocannabinoide medicinalmente activo importante; el THC (tetrahidrocannabinol), junto a este cannabinoide ha demostrado inducir la muerte de células cancerosas in vitro e in vivo en modelos animales, inhibiendo las progresiones de los tumores.
El CBD no tiene efectos psicoactivos; el THC, sí. Pero ambos poseen un valor terapéutico muy significativo, que se potencia cuando trabajan juntos; se produce un efecto sinérgico: el CBD potencia determinadas propiedades del THC, como las analgésicas o las anticancerígenas, al mismo tiempo que contrarresta su psicoactividad.
Aunque aún no conocemos todas las cualidades medicinales que tiene el CBD, hay evidencia hasta el momento que demuestra sus propiedades:
analgésicas
antiinflamatorias
ansiolíticas
antitumorales
anticonvulsionantes
antipsicóticas
neuroprotectoras.
